Esos zapatos que ya no volverás a usar.
La cama en la que ya no volverás a dormir.
La mujer que ya no volverás a ver.
El libro que no volverás a leer.
Los amigos que no volverás a ver.
Los lugares de tranquilidad que no volverás a visitar.
Los atardeceres que no volverás a disfrutar.
Los abrazos que no volverás a recibir ni dar.
Las sonrisas que no volverán a marcar tu rostro, pero aguarda, aun puedes sonreír por ultima vez. Antes de que en un segundo todo a tu alrededor cambie, antes de que tu cambies y desaparezcas.
Antes de que el día en el que no tengas mas fuerzas llegue asegúrate de haber sido feliz al lado de quienes mas quieres, de haber compartido buenos momentos, que la rutina del trabajo no haya desgastado tus fuerzas de llegar a casa y entregar un abrazo, de dar un beso a tu pareja a tus hijos. Esas personas son mas importantes, a veces se corre el riesgo de cambiar, de ser mas frío y serio, en el afán de querer hacer las cosas perfectas invertimos tanto tiempo, que nos olvidamos de los demás. Al fin y al cabo solo nos quedan los recuerdos no?
¿Como te imaginas tu vejez? Ciertamente lo que se siembra se cosecha y no todos están juntos para siempre.
-¿Que es normal que yo sienta? Las personas ya no piensan solo sienten, sabe que uno de los grandes problemas de nuestra época es que nos gobiernan personas que se interesan mas por sentimientos que por pensamientos e ideas y eso es lo que me interesa a mi, pregunteme por mis pensamientos.
- ¿Y cuales son Margareth?
- Cuidado que se vuelven palabras, y las palabras se vuelven acciones y las acciones se vuelven hábitos y los hábitos forman su carácter y cuide su carácter pues se convierte en su destino, los pensamientos los forman. Mi padre siempre decía eso y yo creo que estoy bien.
0 comentarios:
Publicar un comentario